El Arzobispo que le dice YA BASTA!!! al narcotráfico en México

La violencia en México  esta arreciando. Y el país cada día se vuelve más inseguro.  A lo largo y ancho del territorio nacional el narco ha logrado ya el control total causando miedo y alarma entre la población. Aunque el Gobierno de Felipe Calderón se empeñe (mediante los medios de comunicación ligados al gobierno) en que México es un país de oportunidades y que vive en la prosperidad, esto no es cierto.

La Iglesia pocas veces ha levantado la voz y cuando lo ha hecho a nivel jerarquía lo hace en bola, o sea en grupos de Obispos, ya sea por región pastoral o en su totalidad mediante el Episcopado Mexicano, así  de una manera se protegen, son más bien los laicos quienes se organizan a título personal  para hacer marchas o eventos por la paz.

El valiente que ha decidido levantar la voz es el Arzobispo de León (nombrado Obispo en 1995)  José  Guadalupe Octavio Martín Rábago (San Miguel el Alto, 1935) quien  por cierto ya llego a la edad canónica para jubilarse y quien aun sigue frente a la Arquidiócesis mas pequeña de México. (territorialmente hablando)

Y es que  el domingo  pasado en la Catedral de la Arquidiócesis levanto la voz enérgicamente y dijo ¡Basta ya de violencia! Ahí mismo afirmo: "debemos mostrar solidaridad para que los mexicanos exclamemos con fuerza y determinación un rotundo ¡basta! a la violencia en México; a las muertes sin freno y sin esclarecer, atribuidas al narcotráfico y al crimen organizado, a la corrupción de los servidores públicos y de las figuras de autoridad y representantes de las leyes en nuestro país", "¡Basta! de secuestros, extorsiones, ejecuciones y venganzas ¡Basta! de lastimar a miles de familias, mujeres, niños, jóvenes, trabajadores, ¡Basta! de sentir miedo, inseguridad, violencia y muerte. ¡Basta de mentir!, México aún tiene esperanza".

Decimos que en una actitud de valentía  ha utilizado su poder mediático que como Arzobispo tiene y ahora se ha dedicado a lanzar un llamado, que si bien podemos describir como peligroso, debido a la postura  del Arzobispo, en el mismo comunicado también afirmo: "Mientras la sociedad civil no asuma la responsabilidad que le toca, lo podemos decir con toda franqueza, no podremos salir de nuestros problemas. Lo he escuchado, en otras sociedades, como en Colombia, y dijeron que hasta que la sociedad se animó a tomar parte se mejoró su situación". Abordo diversos temas, entre ellos la infiltración de las mafias en las policías de los tres niveles.

Cabe señalar que pocos han sido los Obispos que se han atrevido a lanzar un enérgico llamado que si bien podría ser triple, primero al gobierno para que asuma su  responsabilidad ante la violencia, a la sociedad civil para que se organice y exija paz,  y al crimen organizado para que  revalore su actitud. Uno de los Obispos que  también alzo la voz  pero que poco a poco fue prácticamente amordazado y amenazado por el narcotráfico es el Obispo Faustino Armendáriz, quien siendo Obispo de Matamoros, Tamaulipas fue amenazado, debido a esas múltiples amenazas  y después fue removido a la Diócesis de Querétaro.

Veremos si este llamado, que no solo se quedo en carta pastoral sino que trascendió los medios de comunicación haga eco en la sociedad mexicana y motive a los Pastores a ser mas activos  en lo que a denunciar se refiere.