1. Hace poco mas de un año llegaron a Roma vía nunciatura unos documentos, fichados con el titulo de Top secret, Iglesia de Escocia. El remitente era la misma Nunciatura. En dichos documentos venia detalladamente la vida nada santa del influyente Cardenal Keith O´Brien, Arzobispo de Escocia. Hasta ese momento no se sabía nada en los medios escoceses.
2. La noticia cimbro al Vaticano y al mismo saliente Papa Benedicto XVI, quien como siempre para minimizar el escandalo decidió esperarse a que en unos meses se hiciera efectiva la renuncia –ipso facto- del Cardenal al cumplir los 75 años.
3. Las victimas habían tocado puertas durante varios años sin ser escuchados, habían sido bloqueados por la influencia y el poder del mismo Cardenal. Entendieron que el Cardenal quería jugar sucio y ellos mismos también jugaron sucio filtrando la noticia a la prensa, sabiendo que su integridad y su privacidad podrían ser menguadas.
4. Al Vaticano no le quedo otra, mas que mandar llamar al Cardenal. ¿Se arreglo algo? Nada, el Cardenal se retiro en su jubilación a disfrutar su dinero y sus viajes al a campiña, que era lo que mas disfrutaba.
5. Se escribía una pagina mas del encubrimiento en las altas esferas de la Iglesia. Uno de los varios casos que existen donde no es extraño que un Cardenal o un Obispo tengan una doble vida, y créame de estos no hay muchos, hay muchísimos.
En Roma se sabía del caso del Cardenal desde finales del Pontificado de Juan Pablo II, algo así como 12 años atrás, y los Papas que hicieron, nada, ni Wojtyla ni Ratzinger hicieron nada, por el miedo que desataría el aceptar que un flamante y poderoso Arzobispo y Cardenal fuera enjuiciado.
Pero ¿Quiénes acusan al Cardenal O’Brien?, aunque suena increíble lo acusan Sacerdotes, que durante varios años los acoso, sobretodo en la década de los 80s, eso sin contar a los Seminaristas y laicos con quienes mantuvo romance y relaciones sexuales.
Hoy el Cardenal de 75 años vive en la campiña irlandesa en el retiro, hace un año admitió públicamente haber tenido “una conducta sexual inapropiada”, lo tuvo que hacer contra su voluntad, por indicaciones del Vaticano, tras las acusaciones probadas de tres sacerdotes y un ex sacerdote, que lo denunciaron. El Cardenal renuncio en febrero del año pasado al saberse su situación y decidio no participar en el Conclave que eligio a Bergoglio como Papa.
Por petición del mismo Papa Francisco se encomendó reabrir el caso y se nombro al obispo auxiliar de Malta Charles Scicluna como fiscal investigador. Así que este influyente Obispo quien trabajo mucho tiempo en el Vaticano no solo investigara al Cardenal sino a otros clérigos de la Arquidiocesis.
A principios de esta Semana en el mensaje de Cuaresma que dirigió el Arzobispo Leo Cushley, sucesor de O’Brien a su presbiterio pidió colaboración total para los Sacerdotes con el fiscal. De hecho volvió a mandar una misiva a todos los Sacerdotes religiosos y diocesanos de su jurisdicción para pedirles encarecidamente su cooperación.
El caso que la situación del Cardenal en Escocia es solo la punta del Iceberg y al parecer Francisco quiere arreglarla, no como Benedicto XVI quien con pompa y platillo anuncio tolerancia cero en el caso de abusos pero no la cumplio al cien por ciento, ya que muchos Sacerdotes y obispos con cierto poder en el Vaticano y en algunas iglesias particulares no han sido tocados, o sea tolerancia cero para el clero de abajo, ¿y para el alto clero que?, esperemos que Francisco atienda pronto estos casos.