2015: FRANCISCO Y EL CAMBIO QUE VIENE EN LA IGLESIA







“Si me equivoco, prefiero equivocarme con el Papa” San Juan Bosco



Francisco esta trabajando a contra reloj. Tiene muy en cuenta que la Iglesia necesita una remodelación total y adecuarse a los tiempos modernos, también sabe que, al igual que  su Santo patrono San Francisco de Asís, urge una transformación.


El Papa sabe que se enfrentará a sectores muy poderosos al interior de la Iglesia que quieren evitar a toda costa una reforma en la misma, estos sectores que viven plácidamente en su “espacio de confort”, eh  ahí la razón por el miedo al cambio.

El pasado sábado 6 de septiembre Francisco en su homilía (ver aquí) sorprendió, y a la vez enviaba las señales de lo que tiene pensado hacer. En esta interesante homilía matutina Francisco  decía: “el cristiano no debe ser  esclavo de tantas pequeñas leyes,  sino abrir el corazón al mandamiento nuevo del amor”. Y afirmo tajantemente: El Evangelio “es novedad”, Jesús nos pide que “dejemos de lado las estructuras caducas”.

Dios ha permitido que grandes personas entren en la historia de la Iglesia para transformarla en momentos de estancamiento. Quienes  han contribuido a la transformación de la Iglesia son ahora Santos, muchos de ellos sin doctorados ni estudios en grandes universidades,  ni con ostentosos cargos en la Iglesia, destacan  San Francisco de Asís, Santa Catalina de Siena, Santa Teresa de Ávila, San Benito de Nursia, San Juan de Ávila y Santa Teresa de Jesús, entre otros,  quienes con la  venia de Dios contribuyeron a la transformación de la Iglesia.

Y como diría el Obispo auxiliar de Madrid en una visita a la Parroquia de Santa Ángela de la Cruz hace unos años, don Cesar Franco, en cuestión entre la relación Iglesia y mundo: “la Iglesia siempre será David frente a Goliat, sólo puede apoyarse en Cristo, nunca luchará en igualdad de condiciones con el mundo actual, y no debe pretender hacerlo. La razón es clara: la fuerza está en la Cruz y no en el marketing que podamos hacer”.

Y es que al interior de la Iglesia existe una clara tensión en lo referente a la reforma de la misma, parece que muchos sectores, sobretodo el conservador viven con miedo. La esencia de la Iglesia es la misma, esa no debe cambiar, mas bien la Iglesia debe adecuarse a los cambios que vive la humanidad, y es por eso la urgente necesidad que ve Francisco para que la Iglesia se reforme y siga creciendo, llegando a los alejados. Eso si  tomando en cuenta que el Evangelio siempre será novedad y su mensaje siempre es actual y no cambia.

Es valida la frase que dio el teólogo calvinista en el sínodo de Dordrecht (1618 – 1619) Gisbert Voetius: «Ecclesia semper reformanda est», y en cierta razón se aplica a la Iglesia católica, por que la Iglesia es un ente vivo y un ente vivo constantemente se esta reformando.
La Iglesia vive un ambiente de estancamiento en estos tiempos en que nos ha tocado vivir, pareciera que ni el Concilio Vaticano II se ha puesto en práctica  en su totalidad. 

El Papa debe tener mucha  agudeza, y en cierto punto creo  que la esta poniendo en práctica, por que tampoco debemos ser como los pseudo tradicionalistas, que han secuestrado la Tradición y pretenden vivir en pleno siglo XXI como si fuera el siglo XVI o como los  “liberales” que quieren ver todo de manera moderna y adecuar todo a su antojo y conveniencia.

Jesucristo ni fue conservador ni fue liberal, fue humano,  y todo lo baso en el AMOR, ahí esta la clave. Y el Papa sabe muy bien esto,  porque  su plan de trabajo esta basado en la misericordia y en el amor.

2015  será un tiempo de cambio y reforma para la Iglesia, el Papa Francisco ha convocado al Sinodo de la Familia para este año venidero. Para esto Francisco ha lanzado 39 preguntas a todo el orbe católico, a través de los Obispos, para entender como va el caminar de la Iglesia en estos temas.

Este abordará temas como la sexualidad, el matrimonio, los hijos, el control de la natalidad, los separados, los divorciados vueltos a casar y la participación en los sacramentos. 

El nivel de preocupación de los católicos sobre estas materias es muy alto. Por lo mismo, la frustración o la satisfacción con los resultados del Sínodo pueden ser grandes.

Las respuestas a las 39 preguntas que el mismo Papa dirigió a fines de 2013 a todo el Pueblo de Dios, son coincidentes: existe una enorme distancia entre lo que lo que la jerarquía enseña en materia de moral sexual y lo que los católicos piensan y practican. Esta distancia, con el pasar de los años, no solo ha sido causa de grandes sufrimientos, sino que se acrecienta. De acuerdo a los informes de las iglesias de Alemania, Bélgica, Francia, Japón y Suiza –las únicas respuestas hechas públicas-, el abismo detectado afecta principalmente a la enseñanza oficial contraria a los métodos artificiales de control de natalidad, a la comunión de los divorciados vueltos a casar y a la posibilidad de una vida sexual fuera del matrimonio (relaciones prematrimoniales, convivencias hetero y homo sexual). El Instrumentum laboris –documento base del sínodo preparatorio que tendrá lugar en octubre próximo, el cual recoge los informes de los episcopados de todo el mundo- concluye prácticamente lo mismo, con la diferencia de dar mejor cuenta de la inmensa complejidad del tema y por reflejar un mayor celo doctrinal.

No perdamos de vista a algunos sectores al interior de la Iglesia que están empeñados en aguadar la transformación de Francisco, sectores que se dicen conservadores pero que actúan mas como escribas y fariseos, que pretenderán confundir al rebaño fiel. Y también  debemos tener cuidado con los supuestos liberales quienes querrán hacer suya la causa de Francisco. 

Estos  pseudo conservadores son los nuevos escribas y fariseos,  son laicos, obispos y Cardenales que no están de acuerdo con el cambio y la transformación de la Iglesia. Los católicos austriacos, suizos, alemanes y suecos ya han iniciado los vientos de cambio, Benedicto XVI se contuvo ante esto, por que sabía que es necesaria la reforma, pero también sabía que no era el momento de iniciarla, esta le tocaría a otro Papa, quizá a Francisco le toca empezarla pero no acabarla.

El caso es que la reforma viene, y como diría el entonces Cardenal Ratzinger en una conferencia sobre reforma en 1990, y que fue editada por Ediciones Encuentro de Madrid, titulada “Ser cristiano en la era neopagana”. En esta conferencia Ratzinger afirmo que  el centro personal de la reforma es la moral, la expiación y el perdón, afirma  A partir del núcleo de la fe se abre así cada vez más la vía de la renovación para cada uno de nosotros, para la Iglesia en su conjunto y para la humanidad”.

Ante la ola de mentiras  y comentarios milenaristas que muchos grupos pseudo tradis han estado difundiendo sobre el Papa  y sus supuestos errores y profecías, yo aplico lo que mi abuela me enseño, católico con el Papa es católico, Católico  sin el Papa es protestante, así que como diría San Juan Bosco: “Si me equivoco, prefiero equivocarme con el Papa”.