Autlán: una diócesis fallida y la inminente renuncia del Obispo

Foto: CEM

Ya hemos alertado sobre la situación que se vive en la sureña diócesis de Autlán, ubicada en el estado de Jalisco en México. Una diócesis con todas las características de una diócesis fallida.

Las características de una Diócesis fallida son: ineficacia episcopal en la toma de decisiones, falta de autoridad del Obispo,  ingobernabilidad pastoral donde los lobbys clericales tienen mas poder que  el propio obispo y encubrimiento de las fechorías de algunos clérigos por parte del mismo.

Esta situación que se presenta en Autlán desde la designación del actúal Obispo viene a mermar el trabajo pastoral que  han realizado sus antecesores y por si fuera poco, pareciera que en esta diócesis existe un vació de poder, caldo de cultivo eficaz para que los Sacerdotes de doble vida hagan de las suyas,  mientras que los que viven autenticamente su sacerdocio son perseguidos y relegados.

En Autlán son bien conocidos los casos, de hecho son de dominio publico, los mas emblemáticos el del Padre Horacio López quien impunemente anda disfrutando de la vida, la delicada situación de los Heraldos y del Sacerdote Guadalupe Santos quien se ha hecho el mártir a raíz de nuestras publicaciones, el caso del llamado "Padre Trampitas", con apariencia de un Sacerdote de vocación pero en realidad con una doble vida,  de nombre Javier García quien se encuentra en El Grullo, aún aparece como Sacerdote en la pagina oficial de la diócesis, pero son bien conocidas sus fechorías sexuales en todas las parroquias donde ha estado, incluso  sabiéndose suspendido (no oficialmente) celebraba cuando podía en la costa, pero ahora curiosamente solo hace la celebración de la palabra en el Grullo, protegido por sus amigos Sacerdotes, quienes cojean de la misma pata, y los casos tan delicados de los Sacerdotes Javier Prado y Jesús Estrella, destacan estos, pero en todo Autlán se saben más. Ademas el coto de poder gestado en torno al sacerdote Luis Orestes Ochoa quien ha sabido mangonear al Obispo para satisfacer sus ansias de poder, mientras que el Obispo desoye las sugerencias  que los sacerdotes con experiencia le hacen.

Mientras tanto el Obispo temeroso de no poder controlar la situación y aunado a esto su  débil estado de salud,  su diócesis  tiene todas las características fallidas antes mencionadas. La destitución del Obispo auxiliar de Guadalajara por parte del Vaticano la semana pasada encendió los focos rojos entre los Obispos mexicanos  que no han sabido o podido  gobernar sus diócesis, cada día los rumores son fuertes en Roma, Autlán, Estados Unidos y Jalisco de la inminente renuncia de quien podría catalogarse como otro inútil Obispo, que no ha podido con el cargo, ni ha sabido poner en orden la diócesis  y que de paso se lleva la fe de muchos autlenses, gracias a no ser un verdadero padre y pastor, ganando con esto las sectas.