México: el Cardenal Sandoval conocía los casos de pederastía de muchas diocesis y nunca hizo nada

El Arzobispo emérito de Guadalajara el Cardenal Juan Sandoval Iñiguez hoy en retiro conoció de cerca muchos casos de abuso clerical y nunca hizo nada.

Al tratarse de los casos de su Arquidiocesis solo removía de parroquia a los Sacerdotes, cuando el escándalo se salia de control este los enviaba al centro Alberione y si el escándalo se apagaba o llegaban a un acuerdo con los acusadores reinstalaba a los Sacerdotes en un lugar lejano, si el Sacerdote estaba en la ciudad lo enviaba  a la periferia o a zonas rurales, si estaba en zonas rurales a la ciudad, pero si el Sacerdote era algo conocido, este era enviado a otra diócesis ya sea dentro de México o fuera de este país, bajo el nombramiento "ministerio fuera de la diócesis" y nunca se daba información a nadie sobre el paradero de los abusadores, esto se aplicaba tanto a curas con concubinas como abusadores.

En su tiempo, cuando Sandoval tenía poder gozaba de una posición privilegiada para poder y deshacer en la Iglesia regional y nacional, por eso logró acomodar a sus amigos, por cierto Obispos fallidos, y hundir a sus enemigos. Cuando había un caso de algún Sacerdote que andaba mal, si este tenía buena relación con Sandoval o con alguno de sus amigos no pasaba nada, pero si no este era perseguido y hasta destituido del ministerio. Ejemplo es el de su mismo secretario particular Miguel Alcalá  quien abuso de unos adolescentes  y seguia colaborando a la par con Sandoval en el arzobispado.

Lo único interesante que a bien tuvo,  fue el bloquear a Carlos Aguiar para que no llegara como Arzobispo a Guadalajara.

Sandoval conocía de viva voz las atrocidades que algunos miembros del clero de Autlán estaban realizando, casos como el de Estrella, Prado, Santos y otros más que poco a poco saldrán a la luz,  Sandoval los conocía, y de tiempo atrás. El caso mas conocido por Sandoval fue el del Sacerdote Estrella, cuando este estuvo en Tenamaxtlán y de viva voz de otro Sacerdote de nombre Albino Navarro, quien esta incardinado a la diócesis de Autlán pero ejerce en la de Guadalajara, ¿que hizo Sandoval? nada, callar, ni siquiera intervenir, el aludía a los Sacerdotes y laicos que cada diócesis era autónoma y que no tenia injerencia, pero Sandoval era el metropolitano, y Autlán  es sufraganea de Guadalajara, por lo que si podría al menos  haber llamado la atención al Obispo y haber notificado a la Congregación para la Doctrina de la Fe, cosa diferente cuando actuó contra el Obispo Carlos Suarez, donde con todo el poder Sandoval logró imponerse para que lo destituyeran y logró intervenir la diócesis, primero quedándose como Administrador diocesano y luego enviando al Obispo Javier Navarro como Obispo de Zamora.

El caso mas delicado se encuentra en la diócesis de Autlán, donde Sandoval conocía los casos, hay testigos laicos y sacerdotes que fueron con Sandoval a pedirle apoyo y este no los apoyo, los envío a la nunciatura  sin resolverse nada, al contrario la situación se fue empeorando, hasta conocer lo que hoy ya sabemos. El caso Autlán es delicado, así como el de otras diocesis mexicanas, lo mas delicado es que los mismos pastores en muchos años hayan guardado silencio, un silencio que los vuelve complices.


No se trata de un ataque contra Sandoval, mucho menos contra la Iglesia como muchos  han querido insinuar, sino una lucha por la verdad y un reivindicación de las victimas.