La podrida clericacia mexicana



Los Obispos mexicanos andan inquietos. Y no esta demás, el Vaticano ha iniciado una limpia silenciosa y discreta. 



Bergoglio conoce muy bien la situación mexicana, lo conoce de primera mano, por eso unos meses después de haber asumido el Pontificado ordenó  a algunos  de sus colaboradores mas cercanos, coordinados por  el Cardenal Oscar Rodriguez a visitar de manera prudente y sigilosa algunas diocesis mexicanas, no fue sorpresa lo que se encontró: protección a curas pederastas, homosexualismo en Obispos mexicanos, enriquecimiento inexplicable, comportamientos morales no propios de un Obispo y otras cosas delicadas que muchos laicos y sacerdotes ya conocen.

De esta visita sigilosa casi ni un Obispo se dio cuenta, solo fueron rumores, pero en Roma se sabe que las cosas en México no andan bien. Y aquí se cumple el dicho popular "que cuando la cabeza anda mal, el cuerpo también".

El problema es que en este circulo vicioso clerical  nadie ha podido poner freno, ni a nivel Sacerdotal, menos a nivel Episcopal. Existe un numeroso grupo de Sacerdotes que conocen las debilidades de su Obispo, muchos callan, otros al conocer los pecados de su Obispo prefieren justificar su doble vida aludiendo que su Obispo anda mal o peor que ellos. Por eso muchos Sacerdotes prefieren  callar para evitarse problemas, por que el nivel de corrupción clerical ha hachado raíces.

A nivel episcopal pasa lo mismo, los Obispos no quieren meterse en problemas, y al conocer casos delicados prefieren callar, aludiendo que cada diocesis es autónoma. Como el caso del Arzobispo emérito de Guadalajara que conoció de viva voz la difícil situación que vivía la diocesis de Zamora en Michoacan e intervino con toda la fuerza de la ley eclesiástica, logrando enviar el caso a Roma, siendo que Zamora no era diocesis de su sede metropolitana, cosa que no hizo ni con Tepic, ni con Ciudad Guzmán y mucho menos con Autlán, diocesis sumidas en serios problemas clericales.

Cuando se llego la fecha de la visita Ad Limina de los Obispos mexicanos  estos se llevaron una sorpresa, durante la Visita no solo incluía reunirse con el Papa, sino también con algunos responsables de los dicasterios vaticanos.

En una de esas visitas los Obispos mexicanos se reunieron con el Cardenal Beniamino Stella, prefecto de la Congregación para el Clero. especialista en derecho y diplomático de carrera. En esa reunión monseñor Stella fue directo y tajante, les dijo en voz clara y en español: "no se tolerará ni un abuso a menores, y todas las denuncias que lleguen al Vaticano contra cualquier Sacerdote u Obispo serán atendidas, independientemente si son de laicos o religiosos". Y es que en dicho dicasterio a diario llegan denuncias de casos de pederastia procedente de México.  Esa fue la orden que días antes Bergoglio le había dicho a Stella.

La clericacia mexicana esta en debacle, podrida y acorralada, la cloaca esta aun por abrirse y los Obispos mexicanos están temerosos, porque todos han protegido y solapado a Sacerdotes pederastas, aquí el problema no es por que lo hicieron, sino que tan eficientes y caritativos fueron con las víctimas, al parecer casi ni uno se dedico a proteger a las victimas, mas bien protegieron, encubrieron y defendieron a los victimarios. Si es así entonces para que queremos pastores así, lobos disfrazados.

Comentarios