Intriga, conspiraciones y chismes en el corazón de la Iglesia, el Vaticano

La Iglesia no está exenta de las intrigas de palacio. Que se puede esperar ante el inicio de un pontificado en decadencia. Y no porque vaya a extinguirse la Iglesia, sino porque esto sucede en todos los ciclos del gobierno de los Papas. La edad avanzada de Benedicto XVI (casi 85 años)  influye para que otros buitres sean quienes manipulen al mismo Papa. Aquí el problema no es el Papa, aunque la información filtrada gira entorno a él, incluso se rumoreo que su vida corre peligro, sino entre dos importantes interlocutores como cabeza de dos poderosos organismos Vaticano, uno, el arzobispo Carlo Maria Vigano y el otro Tarsicio Bertone.

Todo empezó a finales de enero cuando misteriosamente se filtró a los medios de comunicación una especie de información clasificada donde involucra a altos jerarcas vaticanos el primero que dio a conocer la noticia fue el programa televisivo "Los Intocables" del canal 7 de Italia quien difundió las cartas del arzobispo Carlo María Vigano, escritas en el 2011 al Papa Benedicto XVI, en la que le da a conocer varios casos de corrupción dentro de la Santa Sede.

Carlo María Vigano, quien fue entre los períodos 2009 y 2011 vicegobernador del Vaticano, es decir, el segundo responsable en la administración del Estado, comunicó al Sumo Pontífice la red de corrupción, nepotismo y tráfico de influencias vinculados al otorgamiento de contratos a compañías externas al Vaticano, que encontró cuando asumió el cargo en el 2009.

REDES DE CORRUPCIÓN

En una misiva enviada al Papa el 27 de marzo del 2011, Viganó asegura que luchar contra estas redes implicó una campaña de desprestigio en su contra por parte de otros funcionarios del Vaticano lo que implicó que fuera removido de su cargo para ser nombrado embajador del Vaticano en Washington.

"Santo Padre, mi transferencia justo ahora provocaría mucha desorientación y desaliento en aquellos que han creído que era posible limpiar tantas situaciones de corrupción y abuso de poder que han estado enraizadas en la administración de tantos departamentos", escribió Vigano a Benedicto XVI.

El 22 de marzo del 2011, el secretario de Estado Vaticano, Tarcisio Bertone, informó a  Vigano  que sería trasferido de su cargo pese a que debía durar hasta el 2014.
Arzobispo Vigano
VIGANO EL "AGUAFIESTAS"
En otra carta fechada el 4 de abril del 2011,  Carlo María Vigano afirmó al Sumo Pontífice, haber descubierto que la administración de algunas inversiones del Vaticano comenzaron a ser manejadas por un comité de banqueros italianos "que velaban por sus propios intereses más que por los nuestros".

El arzobispo señala que en una sola transacción financiera en diciembre del 2009 el Vaticano, gracias a este comité, perdió "dos millones y medio de dólares".

El programa Los Intocables, que realizó la denuncia, entrevistó a un hombre identificado como miembro del comité de banqueros que mantuvo su anonimato, quien aseguró que entre las compañías, Vigano tenía una fama de "aguafiestas" debido a que siempre exigía transparencia en estos asuntos.

RESPUESTA DEL VATICANO

El Vaticano emitió en días posteriores un comunicado en que confirmó la autenticidad de las misivas aunque criticó los "métodos" usados por el programa de televisión en la investigación periodística. 

Por ello, el portavoz del Vaticano, Federico Lombardi, señaló que la Santa Sede se reserva el derecho de adoptar acciones legales contra la televisora italiana. 

"(tomaremos acciones) por todas las vías oportunas, incluso legales, acciones para garantizar la honorabilidad de personas moralmente íntegras y de reconocida profesionalidad, que sirven lealmente a la Iglesia, al papa y al bien común", aseguró Lombardi.

Lombardi aclaró que los criterios de "transparencias y de sana administración en los que se inspiró Vigano para su gestión siguen siendo los que mantienen los actuales responsables del Governatorato, con probada rectitud y competencia". El portavoz destacó el camino "cada vez mayor de transparencia y fiabilidad y control sobre las actividades económicas de la Santa Sede". 

NO FUE UN CASTIGO

Por otro lado, Federico Lombardi, aseguró que el nombramiento de Carlo María Vigano como nuncio en Washington no es un castigo del arzobispo sino que demuestra la confianza del Papa hacia su persona.

Cardenal Bertone
"El hecho de haber confiado el papel de nuncio en Estados Unidos a monseñor Vigano, uno de los más importantes de la diplomacia vaticana, es una prueba de la indudable estima y confianza que le tiene el Papa", respondió el padre Federico Lombardi.
ASPIRACIONES DEL VATICANO
El Vaticano aspira a formar parte de los países virtuosos en materia de transacciones financieras, un deseo ampliamente querido por el papa. La Comisión Europea elaborará la lista en junio pero en el Vaticano afloran las dudas sobre si el más pequeño estado del mundo formará parte de esa lista de países impolutos financieramente.
El problema radica en la red de corrupción que ha tejido el mismo Cardenal Bertone, quien algunos en el Vaticano afirman que pertenece a una organización secreta de masones que controlan  varios puestos en el Vaticano la cual se está enfrentando a otro grupo no tan numeroso por tener el poder y control de las finanzas de la Iglesia, es por eso que hace meses se acusó a la banca vaticana de transferir 180 millones de euros a Alemania para evadir el control del Banco Central Italiano. La institución vaticana ha respondido que tiene mejor tratamiento de su dinero y que, en cualquier caso, todos los movimientos están controlados.
El supuesto complot para que el papa muera en menos de un año forma parte de todas estas intrigas que se tejen entre los muros vaticanos. Algunos príncipes de la iglesia creen que hay demasiada ambición por hacer carrera entre algunos religiosos y muchas ganas de vengarse por puestos prometidos y nunca desempeñados.
Con todo, no es al papa a quién se señala como el objeto central de estos manejos, sino a su número dos, el cardenal Tarcisio Bertone que ha sabido acumular enemigos en los seis años que lleva como secretario de Estado.
Todos estos problemas tienen su raíz (la cual retomaremos en próximos post) y sus raíces vienen desde el pontificado de Juan Pablo II y la raíz viene de un íntimo amigo del Cardenal Bertone, el otrora Cardenal  y Arzobispo de Nápoles Crescenzio Seppe quien fuera Prefecto para la Propaganda de la Fe en tiempos de Juan Pablo II y a principios del pontificado de Benecito XVI. Quien le retiró de ese puesto al frente de un importante patrimonio vaticano y lo nombró arzobispo de Nápoles.

La institución de la Propaganda de la Fe o llamado el IOR (Instituto de las Obras de la Religión) fue creada en 1622. Sus fondos se destinan a las misiones, preferentemente de África y Asia.

¿Y EL PAPA QUE?
 
Desgraciadamente el Papa  no se entera de muchas de las operaciones inmobiliarias de la institución y cuando se entera lo hace tarde  por eso, ahora los dos hombres más importantes de la Iglesia buscan mayor transparencia mientras uno de los anteriores hombres fuertes de Vaticano (Seppe) se dispone a testificar en un tribunal por el delito de corrupción.

Es por eso que Benedicto XVI de inmediato  llamo a  una junta urgente, después de la noticia, a los Cardenales donde les pidió mesura y prudencia, incluso en la Celebración del Consistorio el Papa exhorto a los Cardenales a dar testimonio de vida evangélica y a no buscar el dinero y el poder, porque será que dijo esto?

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