El mundo no se
acaba ni la Iglesia se derrumba si los
hijos del rebelde Lefevbre no se vuelven
a Roma. De hecho en cierto punto, que mejor. La Iglesia católica no necesita
mas soberbios ni una bola de atrasados tan solo porque quien fuera su Obispo
les dijera que no aceptaran el Vaticano
II y por obedecer a este Señor han puesto
en juego su salvación, porque de corroborarse el cisma se convertirían en
una secta.
Me
atrevo a volver a citar al Padre Fortea con sus exquisitas frases: No traen la
Santa Tradición de la
Iglesia, sino la
Tradición entendida bajo una personal inflexibilidad
decimonónica. No traen el rigor, sino el rigorismo.
No
traen la obediencia a los cánones dentro de la ortodoxia, sino la desobediencia
a los cánones con la excusa de la ortodoxia. No traen la belleza de la
liturgia, sino la soberbia del non serviam.
Y
es que no hay retorno de los lefebvrianos a Roma. La Santa Sede ha ratificado
la ruptura de las conversaciones encaminadas a la reintegración de los miembros
de la Fraternidad sacerdotal San Pío X
(FSSPX) en el seno de la Iglesia católica, anuncia el nuevo prefecto de
la Congregación para la Doctrina de la Fe, monseñor Gerhard Ludwig Müller en una entrevista que la North German Radio
(NDR) difundirá este sábado.
Asi que después de tanto esperarlos y al decir que
siempre no enhorabuena, la Iglesia Catolica no necesita de los
Lefevbrianos, eso si, las puertas están abiertas para los que quieran reconocer
su error y volver a a la Iglesia.
Esta muy claro que el Papa es el menos interesado porque ellos
no regresen, al contrario una de sus intensiones era que regresen, por eso
levanto la excomunión, incluso el fue enviado de su predecesor, Juan
Pablo II, el cardenal Ratzinger lo intentó todo en 1988 par impedir que
monseñor Lefebvre procediera a las ordenaciones episcopales y provocara así el
cisma".
Comentarios
Publicar un comentario
Ofrecemos a los lectores un espacio de libertad para comentar las publicaciones del BLOG.
Por lo tanto por politicas de nuestro sitio se eliminará toda grosería, mala palabra o insulto personal, así como los juicios temerarios infundados y las acusaciones gratuitas. Del mismo modo, en los comentarios no aceptamos acusaciones, nombres de personas ajenas al que comenta ni se aceptarán links a páginas externas. Nos reservamos el derecho de editar los comentarios en este sentido.
Las opiniones de los comentaristas no tienen por qué reflejar el sentir de Santa & Pecadora BLOG y son, en todo caso, propiedad de sus autores.