El Papa nombra una comisión especial para investigar el Banco Vaticano (IOR) el cual desde hace casi 50 años ha venido lavando dinero de la mafia italiana y de otras grandes organizaciones delictivas europeas.
El Papa Francisco sabe la situación que aqueja al interior de la Iglesia. Desde luego sabe la situación que en especial vive el Instituto de las Obras de la religion mejor conocido como el IOR. Heredero de las finanzas del extinto Banco Ambrosiano. Esta misma institución que ha lavado dinero del narcotrafico internacional desde hace mas de 50 años.
Los 5 últimos Papas lo sabían y se hicieron de la vista gorda, por miedo o por pruedencia, o precaución, y es que lo que sucede en el IOR es solo la punta del iceberg que salpicaria a mas de 500 entidades de la Iglesia católica, entre diocesis, congregaciones e instituciones educativas no solo de Italia sino del mundo entero.
Francisco ha nombrado una comisión, para investigar al IOR, tanto en el aspecto juridico como económico. Dicha comisión esta presidida por el Cardenal Raffaele Farina, le ayudan el Cardenal Jeán Luis Tauran, el Arzobispo español Juan Ignacio Arrieta, el teologo norteamericano Monseñor Bryan Wells que es asesor de la Secretaria de Estado y la laica Ann Glendon.
La idea, hasta ahora, de Francisco es limpiar la Curia y con ello el Banco Vaticano por lo que esta Comisión la instituyo a manera de Motu Propio, o sea una ley promulgada directamente por el Papa, todo esto para lanzar la tan anhelada y necesaria reforma en donde "los principios del Evangelio impregnen tambien las actividades de carácter económico y financiero".
Este nombramiento le da a los encargados de la Comisión autoridad y libertad total para recoger "documentos, datos e informaciones necesarias para el desarrollo de sus funciones".
Según los rumores en el Vaticano se cree que Francisco iniciara las reformas la semana que entra, por lo que ya para muchos termina la luna de miel de la Curia y de Francisco.