a la juventud, en Ucrania la Iglesia ortodoxa celebra un acontecimiento importante, diriamos único.
El pasado 27 de julio fue un día histórico para los ortodoxos. No porque ese día se cumplían 1025 años de haber sido cristianizados.
Ucrania fue la sede del festejo y en ella estuvo el Presidente ruso Vladimir Putin, el Presidente de Moldavia Nikolae Timofti y de Serbia, Tomislav Nikolic, quien acompaño a representantes ortodoxos de 9 Iglesias. La celebración de la Rus de Kiev es el primer acontecimiento en muchos años, después de la caída de Rusia. Ahora son tres países que conforman esta tradición y fe católica ortodoxa, son Rusia, Bielorrusia y Ucrania.
La celebración fue presidida por el Patriarca ortodoxo Kirill, jefe de la Iglesia Rusa, acompañado por otros jefes ortodoxos, entre ellos el jefe de la Iglesia Ortodoxa de Jerusalén, Teófilo III; el patriarca de Alejandría, Teodoro II; el jefe de la iglesia georgiana, Iliá II; el patriarca búlgaro, Neófito; el líder de los ortodoxos serbios, Irineo; y el arzobispo de Chipre, Jrisóstomos II.
Este hecho es histórico, ya que han vivido por mas de 50 años de persecuciones y hoy celebran por primera vez un acontecimiento histórico para los fieles de estos tres países, que anteriormente pertenecían a la URSS.
A esta celebración se unió la peregrinación de la cruz del primer apóstol, de Andrés, quien según la tradición es uno de los fundadores de la Iglesia cristiana del imperio Bizancio. Esta cruz también participo en la celebración junto con los Patriarcas y los Políticos.