PELIGRA LA VIDA DEL OBISPO DE APATZINGAN




El Obispo de Apatzingan esta tranquilo. Sereno y en paz. El sabía lo que vendría después de atizar el fuego en el que se encontraba. Sabía que incluso corría peligro su vida al momento de denunciar lo que esta sucediendo en su diócesis, lo que los lobos están haciendo a sus ovejas, y como Pastor, tendría (al menos esa es su obligación moral) que ser un verdadero profeta, y que incluso le costaría la vida.



En pocas palabras este Obispo michoacano es un OBISPO DE HUEVOS y lo pongo con mayúsculas y resaltado por que para mi merece respeto este Señor que aunque ya viejo ha decidido tomar al toro por los cuernos, pase lo que pase.

Y es que a su edad y en su posición muchos Obispos ya quieren esperar la renuncia, su jubilación canónica, como muchos lo dirían, para poderse dedicar a disfrutar sus riquezas, viajar y ser dueños de su tiempo sin la responsabilidad de una diócesis.

Este domingo pasado las autoridades federales han resguardado al Prelado, su casa, sus oficinas, la catedral incluso se habla de que paso la noche en una Base militar, la amenaza ahí esta, latente, y los narcotraficantes no descansaran hasta no matarlo, porque es una persona incomoda.

La presión se ha extendido hasta el Presbiterio de esta pequeña diócesis, quienes a pesar de que su Obispo les preocupa, también les preocupa su propia integridad, al escucharse rumores de que presionaran al Obispo mediante sus Sacerdotes, y los malos saben que lo que mas le duele a un autentico Pastor son sus Presbíteros.

La noticia dio la vuelta a toda la diócesis, llego a todos los Curas a través de los Decanos, el Vicario General fue tajante en la ultima reunión: ¡cuídense y estén alertas!. Y es que los Curas saben que si no pueden dañar al Obispo, el próximo objetivo serán ellos.

Algunos Sacerdotes no estaban de acuerdo con que el Obispo reclamara y denunciara, pero muchos de ellos que están en la sierra y en contacto con la gente y la realidad le decían al Obispo el infierno en que estaban viviendo, eso fue lo que motivo a Monseñor Patiño publicar la carta.

La sociedad e Iglesia deben cerrar filas y apoyarse, ser verdaderos profetas, lo que acontece en Apatzingan no es ajeno, acontece en otras diócesis, pero los Obispos (que no tienen huevos) por miedo a ser profetas y a perder sus privilegios no dicen nada y prefieren callarse.

Insisto si los Obispos mexicanos (tuvieran tan solo un 5 % de agallas como las de sus pares estadounidenses) México ya habría sido otro desde hace mucho tiempo.