Argentina: ligera molestía por que el Papa no felicito al nuevo Presidente



"Ya saben lo que pienso. Voten a conciencia", esta fue la respuesta de Francisco a un par de medios Argentinos, cuando le preguntaron el miércoles 18 de noviembre sobre las elecciones a celebrarse en Argentina.

Entre los argentinos de a pie, y en ciertos círculos gubernamentales ha causado cierta extrañeza que Bergoglio, el ex Arzobispo de Buenos Aires no haya felicitado por ni un medio al reciente electo nuevo Presidente de Argentina Mauricio Macri. Si bien no es un político intachable sirvió para librar a los argentinos del Kirchnerismo, después de mas de 15 años de gobierno y de corrupción..

En las elecciones pasadas compitieron Mauricio Macri por el ala conservadora, y el Kirchnerista Daniel Scioli. Ambos fueron recibidos meses antes por el Papa.

Bergoglio conoce muy bien a Macri y a Scioli, el primero fue Jefe de Gobierno de Buenos Aires por dos periodos (2007 -2011 y 2011 - 2015) y el segundo Gobernador de la Provincia de Buenos Aires también por dos periodos (2007 - 2011 y 2011 - 2015) en tiempos en que este era el Arzobispo de Buenos Aires.

En 2013, Francisco se comunicó con Scioli para transmitirle su apoyo y expresarle su solidaridad en ocasión de las inundaciones que afectaron a la provincia de Buenos Aires. Según contó el gobernador en aquél momento, el Papa le dijo que "siga adelante con su lucha y su trabajo, que Dios lo cuida".

Los medios argentinos han influido en esta actitud de Francisco, que el Vaticano no ha hablado al respecto. El único que ha comentado sobre el tema es Guillermo Karcher, un sacerdote argentino pupilo de Bergoglio quien trabaja es Ceremoniero Pontificio y dada la cercanía con Bergoglio se ha convertido en una especie de portavoz de su mentor.

Ante tal cuestión Karcher afirmó a diversos medios argentinos que: "El Papa, ante las elecciones que dan los distintos países, no puede pronunciarse en ningún caso y según la tradición no hay mensajes ni telegramas", afirmo que el "El protocolo de la Santa Sede prevé solamente que para la ceremonia de la asunción del mando presidencial el Santo Padre nombre un Enviado extraordinario que lo represente". Y así fue, el Papa nombro al Nuncio en Paraguay monseñor Eliseo Ariotti como su representante en la toma de posesión.

Para muchos Argentinos existe un distanciamiento de Bergoglio para con Macri y no es de hace unas semanas, sino desde hace tiempo, cuando Bergoglio era el Arzobispo y Macri el municipe de Buenos Aires, cuando en 2009 Macri no apeló un fallo de una juez a favor del matrimonio de una pareja del mismo sexo en la ciudad. En ese tiempo Bergoglio mediante un comunicado afirmó que Macri "faltó gravemente a su deber de gobernante". Aunque algunos digan que Francisco ya siendo Papa quiso subsanar esa relación invitando a Macri a una audiencia privada en Santa Marta y le pidió que fuera con su esposa (después de 2 divorcios) y que llevara a su hija Antonia, casi recién nacida, por que la quería conocer, quizá un gesto de Francisco en atención a quien sabía que en un futuro seria el sucesor de Cretina (así la llaman los argentinos) Kirchner.

Monseñor Karcher se equivoca al defender a su mentor y decir que no hay un protocolo para saludar a los Presidentes recién electos, ciertamente no existe un manual al respecto, sin embargo el mismo Francisco felicitó a Sergio Mattarella cuando fue nombrado como nuevo presidente de Italia y le dijo en un telegrama el 31 de enero: “Pueda ejercitar su alto encargo especialmente al servicio de la unidad y de la concordia del país”. También existe otro ejemplo de parte de Benedicto XVI cuando en 2012 felicitó a Obama al ganar la reelección.

Entonces es bien sabido que Bergoglio no felicito a Macri no por que no exista un protocolo, sino porque el proyecto de Bergoglio no es compatible con el de Macri, que aunque se diga católico es muy distinto al que el Papa pretende, al menos Macri no tiene la vara alta con Bergoglio como Cristina, quien visito al Papa en más de una ocasión (mas de 7 veces) en horas y tiempos, sin invitación y sin protocolos, incluso lo veía en sus recientes visitas a América. Por eso la ligera molestia de algunos pro Macri al saber que el Papa argentino no felicito a su compatriota.













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