El matrimonio fue celebrado con todos los permisos habidos y por haber, se realizó a finales del mes pasado en la parroquia del poblado de Lorainville a una hora de Abitibi-Témiscamingue, de la diócesis de Rouyn-Noranda.
El permiso para que la religiosa
celebrara el matrimonio fue concedido por la Congregación del
Culto divino y de la Disciplina de los sacramentos que preside el Cardenal Robert
Sarah. Este fue solicitado en febrero de este año y llego el permiso- autorización
el 23 de mayo.
Se trata de la religiosa Pierrette
Thiffault quien desde que terminó la carrera en la Escuela Normal
en 1964 ingreso a la Congregación
Hermanas de la Providencia fundada en Montreal en 1843 por la Beata
Emilia Gamelin. Toda su vida religiosa
se ha destacado por su contribución a la educación, la mayor parte de su
vida ha vivido entre Montreal y Temiscamingue, colaborando en la parroquia de
Saint-Romuald Moffet.
De inmediato los grupos mal
llamados “Tradicionalistas” criticaron el permiso, afirmando que era una treta
del Papa y que era un primer paso para que en un futuro las mujeres, en
especial las religiosas, puedan celebrar el sacramento de la Eucaristía.
Los Tradi enfermos promotores
(como siempre) de la división y de la confusión se han olvidado que el Códigode Derecho Canónico prevé en el numero1112: “Donde no haya
sacerdotes ni diáconos, el Obispo diocesano, previo voto favorable de la
Conferencia Episcopal y obtenida licencia de la Santa Sede, puede delegar a
laicos para que asistan a los matrimonios”.
El revuelo de
esta noticia se sigue dando sobre todo
entre los católicos ignorantes que no
conocen sobre las leyes de la Iglesia, leyes que no se dictaron en este
Pontificado, sino que tienen más de 20 años de vigencia. Esperemos que así como
se dedican a confundir, se pongan a estudiar.
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