Toluca: el nombramiento del auxiliar señales para el próximo reacomodo episcopal

Toluca  es una de las tantas diócesis sumidas en serios problemas gracias a la inutilidad del obispo. Desde 2014 habíamos comentado en el blog (aquí), sobre la incapacidad pastoral del Obispo Francisco Chavolla.

Círculos cercanos al obispo de Toluca se mantienen muy herméticos en torno al estado de salud de Monseñor Chavolla, la cual ha ido a menos en los últimos años. Primero se habló de una pancreatitis, luego de cáncer, situación que ha mermado su desempeño pastoral.

El carácter bonachón del obispo Chavolla ha servido a los lobbys que pretenden controlar el poder en la diócesis y  que como lobos rapaces hacen de las suyas e influyen en las decisiones del obispo.

Desde hace poco más de un año se rumoreaba que el Obispo pediría una renuncia anticipada, esto no se confirmó, lo que si en círculos clericales se  esperaba que al menos llegara un Obispo coadjutor para ayudar a Chavolla. 

Chavolla fue promovido al episcopado en 1991 por el entonces obispo de Tijuana Emilio Berlie, de hecho Chavolla  es el primer (de dos) sacerdote del clero de Tijuana promovido por Berlie, el otro es Ramón Castro, ahora obispo de Cuernavaca.

La problemática de Toluca es similar a la que viven muchas diócesis mexicanas, doble vida de los sacerdotes, empoderamiento de grupos de poder y un obispo debilitado.

El nombramiento que para muchos sorprendió, no porque fuera  de un auxiliar sino porque pensaban que sería coadjutor, aunque el tiempo  y el trabajo del auxiliar lo podría catapultar a la sucesión y convertirse en el titular en unos cuatro años, si es que Chavolla no solicita la renuncia por enfermedad antes.

De Ciudad Altamirano a Toluca, promoción anunciada

El nombramiento  del auxiliar de Toluca es  una promoción anunciada que beneficia  al que lo recibió. El Obispo Maximino es muy conocido en el clero de Toluca, puesto que toda su formación y cinco años de su ministerio lo ejerció en Toluca, sobretodo  en la zona de Atlacomulco, antes de que se separara de Toluca. En 1984 con la erección de Atlacomulco como diócesis se incardino a Recibió varias encomiendas del primer Obispo de Atlacomulco Ricardo Guizar y de las confianzas del segundo, Constancio Miranda, quien fue su principal promotor al episcopado en  2006 para la diócesis de Ciudad Altamirano.

Ciudad Altamirano es una de las diócesis más peligrosas de México, donde el narco hace de las suyas bajo el cobijo del mismo gobierno. Enclavada en el corazón de la tierra caliente de Guerrero es punto neurálgico para grupos armados.

En 2014 fue cuestionado por los medios ante la posibilidad de abandonar la diócesis ante la ola de violencia que aquejaba la región, sobretodo por los asesinatos a sangre fría de tres sacerdotes por negarse a pagar cuotas al narco. Abacuc Hernandez Benitez, Ascención Acuña y el mas reciente Gregorio López Gorostieta asesinados, mientras que la  gente de esa zona  afirma que el sacerdote Joel Román Salazar que falleció en un accidente automovilístico provocado, para evitar investigaciones, estos casos no han sido esclarecidos, a pesar del constante esfuerzo de monseñor Maximino quien recibió amenazas de muerte.

Toluca es una diócesis importante y estratégica, que alberga una zona de poder del grupo gobernante en México, por ello es una buena plaza episcopal. Este nombramiento manda señales para el próximo reacomodo episcopal que se avecina, el grupo entorno al influyente Arzobispo de  Chihuahua emerge haciendo equilibrio con el grupo Monterrey y grupo Morelia y cerrando el paso a solitario arzobispo de Tlalnepantla.