Polonia: investigaciones independientes revelan casos de pederastia y encubrimiento por parte de los Obispos

 

Parece que la catoliquísima Polonia tiene problemas. Si, se avecina una gran y duradera tormenta debido al destape de la cloaca de la pedofilia clerical y el encubrimiento de los Obispos.

Ni el comunismo en el siglo XX logró derrumbar el catolicismo en Polonia, al contrario lo fortaleció. Pero si retrocedemos en la historia podemos darnos cuenta como Polonia es cuna de santos, el mas famoso en este siglo es Wojtyla. La  Iglesia católica goza aun de poder e influencia en las esferas políticas y culturales, incluso tiene prestigio en los círculos de poder, actualmente  y según datos del anuario pontificio el catolicismo en Polonia sobrepasa el 95%, algo inusual en un país que colinda con Rusia y que se encuentra en Europa donde la mayoría se encuentra  a la baja el catolicismo.

Pero, ¿Qué pasa en la catoliquísima Polonia?, que incluso ostenta  el haber sido  sede de dos Jornadas Mundiales de la Juventud.

Resulta que el director,  productor, periodista y escritor de cine independiente polaco de nombre Tomask Skielski se dedico desde hace un par de años a investigar el tema de la pedofilia clerical y el encubrimiento de los Obispos de su país, y encontró mas de lo que andaba buscando. Fruto de su investigación independiente presentó un documental en mayo de 2019 sobre el tema, el cual titulo "No se lo digas a nadie" (ver aquí) el cual habla de los abusos a niños y niñas de sacerdotes del clero polaco y que fueron encubiertos por los Obispos. Fue tanto el éxito del documental que en menos de una semana  alcanzo los 11 millones de visitas en youtube. A la fecha ya sobrepasa los 24 millones. 

El 16 de mayo de este año lanzo un segundo documental, de nombre "Jugando al escondite"  (ver aquí) donde habla del abuso de dos hermanos ( y otros casos) por un sacerdote católico. El video ya sobrepasa los 7 millones de vistas. El autor afirma que esta preparando un documental sobre el papel que jugo San Juan Pablo II en Polonia durante su pontificado en referente a los casos de abuso sexual clerical.

Ambos documentales cimbraron a la sociedad polaca y sobre todo a la jerarquía eclesiástica, el tema ha causado conmoción en la sociedad polaca. Las dos películas  cuestionan la responsabilidad  de los Obispos ante los casos de la pederastia de los sacerdotes bajo su cargo.

Dos casos claves el del Cardenal   Gulbinovicz y el del Obispo Edward Janiak

Algunos medios sensacionalistas afirman que el caso Gulbinovicz es similar al del  ex Cardenal norteamericano McCarrick, hoy degradado a un simple laico, ambos fueron encubiertos y encumbrados por el Vaticano, gozaron de poder  e influencia.

El Cardenal Henryk Gulbinovicz fue promovido al episcopado por el influyente Cardenal Stefan Wyszinski, y de cierto modo protegido por la cúpula polaca y desde luego por el Vaticano. Apenas en este 2020 se saco a la luz publica una acusación de abuso sexual, el tema ya era conocido en algunos sectores de la iglesia católica polaca, era un secreto a voces, pero siempre se guardo silencio. El Vaticano al darse cuenta reacciono, más por evitar un escandalo que por otra cosa, y le prohibió usar las insignias episcopales  y de ejercer su ministerio, además se le prohibió ser enterrado en la Catedral. En el informe  se detalla el abuso cometido en 1989 a un adolescente de 15 años cuando Gulbinovicz era ya Cardenal y Arzobispo de Wroclaw,  tenia 66 años. También se le acusaba de haber encubierto varios casos de curas pedofilos. El Cardenal falleció el 16 de noviembre a la edad de 97 años. Quedando en el olvido mas casos.

El caso del Obispo de Kalisz ha dado la vuelta al mundo. Dicha diócesis tiene  mas de 500 sacerdotes y 282 parroquias, donde el 98 % de su población se considera católica. El Obispo suspendido se llama Edward Janiak de 68 años, promovido al episcopado por el Cardenal Gulbinovicz, quien lo nombró su obispo auxiliar en 1996, después fue nombrado titular de diócesis de donde fue destituido. A raíz de los documentales de Skielski el arzobispo de Gniezno Wojciech Polak solicito intervenir al Vaticano. Janiak puede ser el eslabón de una posible red de complicidad tejida al interior de la influyente y poderosa jerarquía eclesiástica  polaca, cobijada por el Vaticano en tiempos de Juan Pablo II, solo bastaría con investigar al Arzobispo emérito de Gniezno de 82 años, quien fue de las confianzas de Wojtyla y conoció todo el teje y maneje de la Iglesia polaca, puesto que fue nombrado Nuncio apostólico en 1989 y durante 21 años influyo en los nombramientos de Obispos. Como jefe de la Nunciatura conoció todas las acusaciones de pederastia que iban dirigidas al Papa.