México: Arzobispo de Chihuahua recibió 200 mil pesos mensuales de parte de un ex gobernador acusado de narcotrafico

 

No es un suceso aislado. Tampoco es una noticia  de ataque contra la Iglesia. Es la realidad, la realidad de la colusión de la jerarquía de la Iglesia con el dinero sucio, con el narco, con los políticos corruptos. Si hoy mismo el gobierno mexicano hiciera una investigación sobre lavado de dinero en la Iglesia católica, se llevaría sorpresas.

El dinero sucio se ha utilizado en la construcción de casas de retiros, seminarios, edificios para uso pastoral y colegios. Y mas aún para satisfacer las necesidades personales de algunos curas y uno que otro Obispo, no se diga de Cardenales. No es nuevo, tiene por lo menos 50 años.

La noticia  salpico a los Obispos de la jurisdicción eclesiástica dentro del territorio del Estado de Chihuahua, y dentro de esa región esta la Arquidiocesis del mismo nombre y las diócesis de Ciudad Juarez, Cuauhtémoc - Madera, Nuevo Casas Grandes, Parral y la Tarahumara, mismas que son las sufraganeas.

La noticia fue dada a conocer por el mismo Ministerio Público  de la localidad la semana pasada, donde afirmaba que el Arzobispo y los obispos de Chihuahua recibieron dinero  de parte del  entonces gobernador del estado Cesar Duarte  quien se encuentra detenido en Estados Unidos. 

El político gobernó su estado de 2010 a 2016. Durante ese periodo el Arzobispo de Chihuahua recibió 200 mil pesos mensuales, y otros obispos 100 mil pesos también mensuales, en la llamada nomina secreta del ex gobernador.

El Arzobispo beneficiado

En los seis años que gobernó el Gobernador Duarte dio 200 mil pesos mensuales  al recién llegado Arzobispo Constancio Miranda Wechmann, quien es arzobispo de Chihuahua desde 2009, anteriormente Miranda fue Obispo de la diócesis de Atlacomulco sede del grupo político mexicano, que lleva el mismo nombre y que gobernó por muchos años México. Entonces el Arzobispo Miranda hoy de 68 años recibió en ese sexenio mas de 14 millones de pesos.

Chihuahua no tiene obispos auxiliares, entonces de los otros Obispos que habla la investigación  se refiere a los Obispos de las diócesis sufraganeas, sobre todos dos Obispos de la diócesis  de Parral lugar donde nació el corrupto gobernador, se trata de monseñor Jose Andres Corral Arredondo quien fue el primer obispo de Parral desde 1992 hasta 2011 (año en que murió a la edad de 65 años), quien tenía una excelente relación con la familia del corrupto gobernador. A este le sucedió monseñor Eduardo Cirilo Carmona Ortega quien gobernó Parral de 2012 a 2019, año en que fue trasladado a la diócesis de Córdoba Veracruz. Otros cinco Obispos están en la mira de las autoridades y son: Rafael Sandoval quien gobernó la diócesis de la Tarahumara de 2005  a 2015 y en ese año fue trasladado a la problemática diócesis de Autlan. Los Obispos de Ciudad Juarez el emérito Renato Ascencio León y el actual José Guadalupe Torres Campos, así como los Obispos de Nuevo Casas Grandes Jesús Herrera Quiñones y el Obispo de Cuauhtémoc-Madera  Juan Guillermo Lopez Soto.

La realidad de las diócesis de Chihuahua bien puede reflejar la realidad de toda la jerarquía eclesiástica en México, un episcopado beneficiado por las dadivas  de los gobernantes, ahora se entiende porque los Obispos mexicanos les falla el profetismo y su voz no hace eco en  nada. Viven en su espacio de confort, como príncipes.

A casi una semana de dada a conocer la noticia, ni el Vaticano ni la Conferencia Episcopal han dicho nada.